Editors BlogConf 3: La flexibilidad de los compactos
Para debatir al respecto, allá se juntaron Robb Montgomery (creador de VisualEditors.com y editor de diseño del Chicago Sun-Times, Estados Unidos), Mario García (director de la consultora García Media) y Jan-Eric Peters (editor en jefe de los periódicos alemanes Die Welt, Welt Kompakt y Berliner Morgenpost).
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Robb Montgomery hizo hincapié en la flexibilidad que aportan los compactos: sus diferentes estilos abren la posibilidad de conectar con cada estilo individual de lectura. En cambio, los sábanas son mucho más rígidos en sus propuestas y más formales. Montgomery aprovechó para mostrar varias imágenes del Red Streak, un gratuito para jóvenes que él mismo diseñó en 23 días en 2002 para salir a competir contra el lanzamiento de Red Eye. Según Robb, el tabloide joven es un laboratorio para los editores del Sun-Times. Ellos aprovechan para testear allí conceptos e ideas que luego, a veces, trasladan a la edición principal del diario.
(La conferencia completa de Robb podés encontrarla aquí, aunque en inglés).
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Jan-Eric Peters cree que la fiebre de los compactos todavía no ha llegado a su punto más alto. Para él, la epidemia continúa y se cobrará aún más víctimas.
“El lanzamiento del Welt Kompakt aumentó nuestra circulación un 10% el año pasado y pudimos acceder a diferentes grupos de lectores”, dijo. Y remarcó que el Welt Kompakt no difiere del Die Welt sólo en su tamaño, sino que implica un cambio de concepto: “mientras que el Die Welt pone el foco en el análisis, el Welt Kompakt pone enfásis en las noticias y tiene un cierre muy tarde, a la medianoche”. Además de un precio reducido de 50 centavos, estas características han convertido al nuevo periódico en uno muy atractivo para los jóvenes con buena educación e ingresos relativamente altos.
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Mario García, uno de los más fervientes adeptos a los tabloides, disparó: “desde 1984, no he presenciado un solo focus group en el que los lectores no hayan dicho que prefieren la versión tabloide de los periódicos”. Más claro, imposible.
En su presentación, Mario dio una serie de consejos acerca de cómo pasarse a un formato compacto:
1. Elegir el tamaño: estilo europeo o más pequeño como los tabloides norteamericanos. (Mario prefiere el estilo europeo porque, al ser un poco más grande, permite publicar fotografías más grandes y un poco más de texto.)
2. Decirle adiós a los textos largos. Decirle hola a las grandes fotografías.
3. Aumentar el tamaño de los titulares, un elemento clave para los tabloides.
4. Las fotografías son las reinas de losc compactos. Se prefieren las más grandes antes que las chicas, y las de tamaño mediano no se usan. Además, puede haber dos entradas a los artículos: una entrada visual (a partir de la fotografía) y otra entrada textual (a partir del titular).
5. Los anunciantes se benefician con los compactos porque la gente ya no dobla más el periódico y las dos páginas se ven juntas al mismo tiempo.
6. Hacer la transición de a una sección por vez. No tiene por qué hacerse toda al mismo tiempo. Es bueno empezar por una sección, por ejemplo la de deportes.
7. La percepción respecto a los tabloides hace retroceder a algunos editores. Pero no pasa lo mismo con los lectores. La mayoría prefiere menos textos y formatos más pequeños. Los únicos que piensan que los tabloides no son serios son los editores. Nadie más que ellos piensa eso.
