Tabloi: Una experiencia popular de calidad (primera parte)
(Por Claudia Burga Cisneros) A mediados del año 2002, y de acuerdo a las tendencias contemporáneas vigentes en el periodismo de primera escala, Empresa Editora El Comercio decidió preparar un nuevo diario alterno al principal, “El Comercio”, con el objetivo de renovar la oferta informativa existente en nuestro medio. El nuevo diario fue denominado “Perú.21”, bajo el precepto de entregar a los lectores el primer diario popular de calidad (con análisis y opinión) de carácter serio, del país, que se entregue a los lectores en formato tabloide.
Vale decir que, hasta ese momento, la prensa tabloide en el Perú estaba directamente asociada al periodismo sensacionalista y al lenguaje de “replana” (“slang”).
“Perú.21” se alejó de plano del estereotipo y fue lanzado con esta nueva propuesta, con el claro objetivo de convertirse en el principal referente para la opinión pública del país. En tal sentido, se fundamentaría en investigaciones serias y en columnas de opinión de expertos, con el fin de lograr un posicionamiento líder basado en su credibilidad.
El diario apuntó a cubrir el espacio libre en los segmentos populares dejado por los tabloides sensacionalistas. En ese sentido, “Perú.21” fue pensado para jóvenes y adultos contemporáneos de niveles socioeconómicos B-C –los más numerosos de la población lectora– integrantes de la clase media profesional, la media típica y la popular emergente, aquellos con alta aspiración de movilidad social y entre quienes era posible ampliar la masa de consumidores. Para este fin, el diario concretó una oferta de contenidos informativos, educativos, de opinión y de entretenimiento serios, capaz de darle la “distinción” que los lectores estaban buscando infructuosamente en el mercado informativo de entonces.
