| Los hechos de hoy muestran que el discurso visual parece haberse convertido en una forma de decir en imágenes lo que tal vez no se puede poner en palabras sin dejar de ser “políticamente correcto”. Y se ha vuelto una forma mucho más sutil de editorializar. Sutil pero más poderosa, porque, en realidad, los efectos de algunos editoriales visuales pueden ser mucho más sugestivos, movilizadores y convincentes que los más sólidos y argumentados discursos textuales. |
Elegir una fotografía no es sólo cuestión de buscar la mejor en términos periodísticos. Es también optar por una serie de significados implícitos y explícitos.
Mañana, en nuestra sección
La foto de la semana, sigue el debate (o, más bien, comienza).