Panini dominical
La noticia que se conoció en abril está más que confirmada. En septiembre vuelve a los kioscos el diario Perfil, aunque sólo con una edición dominical. Su redacción, con Claudio Gurmindo a la cabeza, ya está haciendo las primeras pruebas en el edificio de Chacabuco 271. Pero la novedad es que el diario no vendrá solito... sino en forma de panini.
Sí, al mejor estilo sandwich. Es que el hombre fuerte de Editorial Perfil, Jorge Fontevecchia, ha decidido que su más preciada criatura no va a pelear solita su lugar entre los diarios argentinos y por eso se ha propuesto copiar a los italianos y entregar junto con el periódico una revista de “alta gama”: lujosa, con papel de la mejor calidad, muchas páginas, encuadernada con lomo cuadrado y contenidos claramente segmentados. En lugar de crear una publicación nueva, Fontevecchia optó por aprovechar la marca y la estructura preexistente de uno de sus actuales productos editoriales: la revista femenina Luz, hasta ahora mensual. El combo sandwicheril sólo estará disponible para los lectores de Capital Federal y Gran Buenos Aires, que podrán adquirirlo abonando $3,5o (en el interior del país la revista se seguirá vendiendo en forma separada).
Teresa Napolillo, directora de Luz, está haciendo malabares para ampliar el staff con el que contaba hasta ahora. El tiempo apremia. La distinguida periodista asegura que la publicación no cambiará ni un ápice el estilo y que van a mantener la misma cantidad de páginas (alrededor de 200) que entregan en la actualidad . “No vamos a competir con La Nación Revista ni con Viva, de Clarín”, aclara. La receta es bien precisa: moda, belleza, decoración, la tradicional vidriera de personajes “eventeros” y algunas pocas entrevista a personalidades masivas y mediáticas.
Así que nada de esperar investigaciones, reflexiones u opinión. Para eso, se supone, estará el diario. En un artículo reciente en la revista Noticias (también de Perfil), lo explicaban sin empachos: “Luz y el diario Perfil serán la pareja ideal entre la elegancia y la inteligencia. Por algo el diario lleva artículo masculino y la revista, femenino”. Queda claro que para esta propuesta editorial la materia gris parece ser patrimonio exclusivo de los hombres.