Reflexión:Cuando dos mundos se tocan (1)
El domingo llegó. Algunos trabajamos y otros descansamos. Pero afuera de las redacciones el ritmo es distinto. Más lento, más tranquilo. No siempre podemos parar la pelota y mirar a quién se la podemos pasar. Vamos muy rápido. Pero hoy no. Hoy vamos a disfrutar una especie de artículo filosófico, escrito por un grande. El tucumano Sergio Fernández, director de arte de "La Gaceta", nos propone una reflexión muy profunda y dominguera.
Hoy, la primera parte.
(Por Sergio Fernández) ¿Existen mundos paralelos? Muchos los creen posible. Y yo mismo -que a menudo he jugado con la idea leyendo algunos relatos fantásticos- estoy en condiciones de afirmar que los mundos paralelos existen y que cuando ambos se tocan, cuando esos dos universos distintos, que tienen sus propios códigos y lenguajes se mezclan entre sí, sucede el hecho capital y maravilloso de la creación de un mundo nuevo. Me refiero, por supuesto, al diseño y a la escritura. O lo que es igual, al mundo de la imagen y al de la palabra.
En los tiempos de mi ingreso a LA GACETA tuve la sensación de que la redacción -esa gran cocina donde surgen los más deliciosos menúes- era demasiado grande. Me sentía como un pequeño alfiler en medio de un taller de alta costura. Esa impresión tenía su fundamento: me habían asignado un espacio pequeño en un rincón de la redacción y las tareas de diseño estaban supeditadas a la voluntad y al criterio de los periodistas que, obviamente, privilegiaban la palabra sobre la imagen, según la tendencia de aquellos años. Muchas veces me sentí como un polizón en un barco: no sabía qué hacer a bordo y más de una vez tuve la idea de cambiar la actividad. Con el tiempo, mi impresión se modificó. Había muchos elementos que indicaban la necesidad de dar mayor protagonismo al área de diseño en la vida cotidiana del diario. Era necesario que la imagen cobrara un mayor espacio, porque el mundo entero estaba cambiando y privilegiando cada vez más lo visual.
En ese momento comenzó a gestarse lo que hoy es un departamento de arte y empecé a tener el apoyo de la gente que me había incorporado a la sección. Mis ideas comenzaron a crecer , a pesar de que aún era muy grande mi desorientación en ese campo. De una manera muy primitiva comencé a entablar pequeñas batallas con mis compañeros editores para tratar de que lo visual tuviera su espacio propio. Cuando dos mundos se tocan, cuando ese encuentro entre dos universos totalmente distintos se produce, es frecuente este tipo de batallas. Pasó lo mismo cuando Cristóbal Colón puso su pie por primera vez en América, o cuando James Cook vio por primera vez el estrecho de Nueva Zelanda.
Un periodista amigo, editor de páginas, comentó entre risas y gestos graves, que comenzaba la "tiranía de los diseñadores", aunque reconoció finalmente que la combinación entre la imagen y el texto le daba un mayor valor agregado a la información. De cualquier forma, el diseño fue convirtiéndose poco a poco en un eje entre la elaboración de la noticia y el producto final, por lo que la tarea cotidiana se volvió más armónica. Hoy, el departamento de arte y diseño y los editores discuten sobre la mejor forma de presentar una noticia a los lectores, trabajando la imagen, el texto y el espacio, a fin de generar un producto atractivo, que invite a la lectura y a la observación, por encima de lo que puedan haber visto en la televisión u oído en la radio.
Sergio Fernández es director de arte del diario "La Gaceta", de Tucumán, Argentina. Este artículo fue publicado en la revista "Progetto Grafico", de Milán, Italia. El equipo que lidera Fernández ha ganado alrededor de 145 premios en la SND.