La Coca-Cola, según El Norbi (2)
El 14 de marzo escribimos sobre la otra faceta de El Norbi, como creativo publicitario, y muchos se quedaron con las ganas de leer los copy y ver mejor la dirección de arte de los mismos.En esa oportunidad también habíamos nombrado a algunos de los redactores que habían tenido paciencia con él y que lo habían acompañado en alguna dupla momentánea. Además de Raúl Manrupe, Fabián Trapanese, Joaquín Mollá y Nacho Pedemonte, El Norbi se había olvidado de Natalia Sternschein.
La primera pieza la hicimos con El Pampa Pedemonte y era una comunicación bastante agresiva para lo que venía manejando la Coca. Un copy que apelaba a un aprete y una dirección de arte deliberadamente intimidatoria ofrecía un mix que nadie de cuentas de McCann se animaría a presentar. En su momento (1996), los gerentes de la gaseosa eran más conservadores que ahora (mucho más) y este tipo de piezas eran las candidatas preferidas para dormir en la basura. Pero la aceptaron y fue finalista en el FIAP.
Acá la propuesta también tenía una dirección de arte bastante grunge. Pertenecía a la etapa Carson de El Norbi. Pero su planteo funcionaría notablemente en ese momento de quiebre de la gaseosa. De nuevo con Pedemonte logramos una pieza interesante que marcaría un nuevo cambio en la Coca-Cola: la botella vacía. Uno de los mandamientos secretos de la bebida gasificada establecía la prohibición de mostrar botellas sin líquido. Lo hicimos acá y lo llevamos al comercial de lanzamiento del litro.
Esta tercera imagen forma parte de una mini campaña que hicimos para un gira europea de equipos de hockey, rugby y futbol. Nos pidieron una pieza y trabajamos en tres. Una apelación directa, bien teen, con una dirección de arte artesanal, producto de un trabajo mixto (compu+mano), dió tres páginas diferentes para la misma Coca.
Los copy se basaban en las típicas órdenes que reciben los jóvenes para darles otro significado, más irreverente. En la rugby, el usar la cabeza para estudiar se confundía con usarla mejor en una montonera o en la de futbol, el uno tendría otro significado.