Lo Peor del 2010: Clarín hace campaña por Duhalde, mientras que La Nación recuerda a Kosteki y Santillán
Tenemos muchas definiciones de periodismo disponibles. También tenemos a muchos que tienen empresas que venden diarios y que también se autodefinen como empresas periodísticas. También tenemos a gente que escribe y dice ser periodista.
Seguro que hacer periodismo no es lo que hace hoy Clarín. Seguro que una empresa que vende diarios, cada vez menos, como Clarín no es una empresa periodística. Y es evidente que el que escribió la nota que aparece hoy en este diario no es periodista.
Hoy Clarín demuestra que es simplemente parte de la oficina de prensa de un candidato a Presidente, cuando publica toda una nota, sin ningún tipo de comentario del que escribe ni relación con la realidad.
Cuando Clarín titula con un Duhalde reclamó poner un orden definitivo pero “sin tirar tiros”, y evita recordar que hizo Duhalde cuando estuvo en el gobierno, un distraido puede llegar a concluir que Duhalde tiene razón.
Por supuesto que se puede poner orden sin tirar tiros, pero semejante afirmación de sentido común pierde rigor periodístico si el periodista y la empresa periodística que está detrás no recuerda como ese gobierno asesinó a balazos a Maximiliano Kosteki y Darío Santillán.
Pero todo se convierte en una verdadera farsa del supuesto periodismo que ejerce Clarín cuando edita la frase y la saca de contexto. Esa terrible manipulación es una prueba clara de que lo que está haciendo Clarín es cualquier cosa menos periodismo serio.
Pero veamos cómo es la frase original que Clarín no reproduce en su totalidad. Duhalde dice a una radio: "Se puede poner orden sin tirar tiros. Ya lo hice en 2002. En ese momento había sólo tres objetivos. Mantener la democracia, pacificar y ordenar el país sin tirar tiros y cambiar el modelo económico social surgido de los consensos de Washington. Cumplí. Entregamos el país en una fiesta de la democracia".
Y es el diario La Nación la que recuerda hoy lo que pasó en esa fiesta del 2002 duhaldista. "Omitió un dato central: en junio de 2002 los piqueteros Maximiliano Kosteki y Darío Santillán fueron asesinados por policías bonaerenses en una manifestación en el puente Pueyrredón".