Lo Mejor del Año: El Periódico de Catalunya tiene algo más que infografías
Cuando la European Newspaper Congress había premiado a El Periódico de Catalunya como Mejor Diario Diseñado Regional de Europa. Por supuesto, no podíamos con nuestro genio y conseguimos que, en exclusiva, escribiera uno sus protagonistas.
Le pedimos a su redactor jefe senior de infografía, el gran Jordi Catalá, que escribiera. No lo hizo sobre gráficos informativos, sino sobre el premio que recibió en Viena, junto a su director de arte, Ferran Grau.
(Por Jordi Catalá) Hoy no voy a escribir sólo sobre gráficos informativos ya que El Periódico de Catalunya acaba de recibir en Viena por parte de la European Newspaper Congress el premio al Mejor Diario Diseñado de Europa, en su categoría. Esta gran noticia, que también se debe a los muchos esfuerzos y méritos desplegados en infografía, viene a corroborarnos laimpresión de que en los últimos tiempos se están haciendo en el diario muchas cosas importantes en materia de imagen y diseño. De hecho llueve sobre mojado, en el mejor sentido de la expresión, pues el pasado mes de noviembre El Periódico ya había recibido, por parte de la SND, el premio especial al mejor diseño de España y Portugal.
Todo empieza hace dos años. Un nuevo equipo directivo se hace cargo del diario y con él soplan poderosos aires nuevos repletos de ideas. No se trata de derruir lo que hay sinó de implementar, reformar, acrecentar y conducir al diario por nuevos caminos expresivos. Ir más alla en las formas comunicativas para acercar el producto aún más a su lector y esto pasa por jerarquizar de diferente manera los contenidos del diario primando los temas más cercanos, tanto a nivel de contenidos, como a nivel gráfico. Esta voluntad conduce a una importante apuesta que es la que atañe a este artículo: el diseño.
El Periódico de Catalunya ya nació con una imagen diferente y voluntad de ser un medio popular.Durante sus 30 años de vida ha roto un montón de esterotipos convirtiéndose en modelo y objeto de copia. Dos rediseños de Toni Casas y continuados rediseños de baja intensidad, pero permanentes, han hecho del diario un medio en contínuo movimiento. Fue el primero de España en tener color, utilizó y utiliza masivamente la infografía, como género periodístico y como marca representativa, ha primado la calidad de imagen y la edición gráfica y su equipo de fotógrafos ha crecido permanentemente en cantidad y en calidad.
Ahora, además, hay una apuesta valiente por utilizar este rico patrimonio con objetivos arriesgados buscando nuevas conquistas gráficas pero primando sobre los contenidos y sobre la estética, la simbiosis de ambos: conseguir imágenes que estén diciendo cosas y que lleguen a su destinatario de forma impactante. Para obtener esto utilizamos muchas fórmulas visuales. Pero para no cansar más sólo les voy a hablar de las que más alegrías nos han dado en los últimos tiempos: las portadas.
Existen, simplificando, dos tipos de portada: las convencionales y las monotemáticas. Estas últimas proponen un tema importante, de debate, de impacto, de actualísima actualidad. Huyen del síndrome portada arrevistada, como sí utilizan Libération, The Guardian o The Independent y se proponen informar al mismo tiempo que conseguir hacer reflexionar y en definitiva editorializar gráficamente mediante el apoyo tipográfico, fotográfico o infográfico.
En el pasado congreso de Viena, cuando nuestro actual director de arte Ferran Grau hablaba de éstas y otras cosas y mencionaba nuestro equipo de 35 fotógrafos en plantilla, al margen de colaboradores más o menos fijos. Se sobresaltó la audiencia. Las 500 personas que llenaban la sala principal del soberbio ayuntamiento de la capital vienesa empezaron a murmurar. La cifra les pareció como mínimo increíble. ¡Y no!, es un ejemplo más de una política personal a favor de la imagen que sortea el riesgo y la incredulidad y que, seamos claros, es imposible de realizar si no tiene el soporte de los máximos responsables del medio y que en este caso no sólo se trata del apoyo ya que las ideas también emergen de ahí y tienen nombre y apellidos, los del
director de El Periódico: Rafael Nadal.
Nadal ha sabido rodearse de un equipo directivo que entiende e interpreta sus ideas correctamente y al frente del área de diseño colocó a Ferran Grau, con probada eficiencia creativa en muchos otros diarios españoles, que sabe plasmar los temas con imaginación y llevar a buen puerto los proyectos planteados. De este esquema piramidal, capaz de crear propuestas nuevas y rompedoras, como reacción a la palpitante actualidad, transcurren dos años de sorpresas, éxitos y una aceptación popular cada vez mayor que convierten a El Periódico en uno de los tres o cuatro diarios con más lectores de la Península a pesar de no ser un medio nacional pues su ámbito de lectores es básicamente barcelonés y catalán.