El Negro Fontanarrosa: La carta de despedida
Ese domingo 14 de enero, el Negro Fontanarrosa se despedía de sus seguidores con esta carta. Decía a los lectores, pero él no tiene lectores, tiene devotos seguidores como estrela de rock and roll. En esa carta, como es su estilo, te pega una piña y después te da unas curitas. “Finalmente, la mano derecha claudicó. Ya no responde, como antaño, a lo que dicta la mente.” Con esa demoledora primera frase, el rosarino trata de explicar lo inexplicable, lo absurdo.
“Por lo tanto, e independientemente de que yo siga intentando reanimarla, me veo en la necesidad de recurrir a alguno de los muchos excelentes dibujantes y amigos que tengo para que pongan en imágenes mis textos.” Éste es el momento en que todos empezamos a tranquilizarnos, porque Fontanarrosa aclara que continuará haciendo su humor gráfico.
“Nadie mejor, a mi juicio, para graficar mis ideas, que el Negro Crist. Porque lo conozco desde hace más de 30 años, porque somos como hermanos y porque dibuja en blanco y negro o a color, mucho pero mucho mejor que yo.”
A continuación, VisualMente te ofrecerá la palabra de ese otro Negro, Cristóbal Reinoso, Crist, quien prestará su trazo al rosarino.
Y para cerrar la carta, Fontanarrosa nos ofrece una curita: “Vale este informe a los lectores para que no se sorprendan al advertir que he mejorado notablemente la calidad de mis trazos y de mis colores”.