宜しくお願いします。[Por favor!]
(Ya han pasado algunos días desde lo que le pasó a Japón, pero la cosa no pasó. El uso de la catástrofe por parte de los diarios no ha sido distinto que otras anteriores. Siempre nos ha llamado la atención la inmediata reacción visual de los diseñadores en este tipo de situaciones. Pero ésta vez quisimos saber que pensaba (y sentía) un profesional del diseño que está muy cerca de la catástrofe. Por eso le pedimos a nuestro columnista japonés Kohji Shiiki que escribiera, dentro de las limitaciones energéticas que se están imponiendo en Tokio, sobre éste aporte solidario y visual. Nosotros le mostramos lo que estaba haciendo un grupo de diseñadores españoles, que nos recomendó Rodolfo Fernández Álvarez, columnista de Chillart, sensible a éste tipo de manifestación solidaria)
(Por Kohji Shiiki) He visto lo que están haciendo la gente de Designers for Japan. Me parece buenísimo reflejar solidaridad a través de diseños. No hay dudas que es la herramienta que debemos utilizarla. Pero desearía que esto pueda conectar a empresas o grupos con poder adquisitivo para establecer una ayuda concreta a los damnificados del terremoto.
Me llamó mucho la atención de algunos comentarios que han dejado en el sitio de gràffica. Cualquier país sea el que sea necesita de ayuda monetaria ante una catástrofe. Quizás en países como Japón el dinero se junta más rápido y probablemente en mayor cantidad pero es absurdo los que dicen que Japón no necesita de tales ayudas por ser un país rico.
Lo que puedo decir es que este país viene en una crisis económica muy jodida. Los tiempos han cambiado de aquel Japón de la época de la burbuja que se terminó allá por los mediados de los 90s, justamente cuando tuvo que pasar otro desastre que fue el terremoto de Kobe.
Creo que sería interesante pensar en como generar donaciones a través del diseño, por ejemplo a través de organizaciones mundiales como la Cruz Roja. Personalmente he dado mi pequeña donación a través de ella.
Como todo el mundo sabe, son cientos de miles las víctimas golpeadas por esta catástrofe y algunos que se salvaron la quedaron por falta de materiales de primera necesidad, ya que el clima sigue siendo muy frío en el noreste y se dice que en algunas zonas afectadas hay un serio problema para trasladar materiales de ayuda.
En Tokio, lo grave sigue siendo el problema energético de la ciudad. Lo más sensato es consumir la menor cantidad de electricidad posible, porque es obvio que afecta gravemente a la economía de país. Como anécdota, un conductor de la radio decía ayer: "Si Tokio no esta bien, el país entero no esta bien y no podemos salir de este pozo".
Y creo que tiene mucha razón. Sin ir muy lejos, la revista donde laburo esta todo jodido. Hablando con un colega que trabaja en el diario Yomiuri en inglés, me decía que no hay suficiente papel para imprimir el diario en las siguientes semanas.
Volviendo a la labor del diseñador, como te comenté anteriormente, descubrí un sitio web donde diseñadores gráficos promueven mediante posters el problema energético. Los diseños son descargables para imprimirlo y pegarlo en las paredes. En síntesis, el diseñador tiene esa virtud de poder crear, promover o denunciar mensajes a cuestiones concretas.
Creo que es lo que hay que hacer en situaciones como las que se viven en estas latitudes. No descarto que el diseñador gráfico logre una ayuda emocional, pero para tal ayuda también están los músicos y cómicos, por mencionar algunos.
Para ver más afiches japoneses, entrá a Chillart.