Estamos festejando entre los compañeros nuestro primer año de vida. El diario Crítica se convirtió en una improvisada parrilla al paso con un maestro asador del carajo (el gran Alejandro Bianchi). Las fotografías pertenecen a un no muy borracho Diego Paruelo. El Norbi estaba muy borracho.
Publicado por El Norbi Baruch a las 11:47 p.m.
Categorías: Crítica