Siempre nos había gustado la revista norteamericana Wired. Wired se había destacado siempre por estar varios pasos adelante dentro del mercado editorial. Hace cinco años, le hicimos un reportaje muy extenso a uno de los responsables de la publicación. Allí le planteábamos al norteamericano Jeremy LaCroix nuestra procupación por la falta de límites entre los contenidos periodísticos y los publicitarios que nosotros veíamos en su revista. En agosto de 2009, el actor norteamericano Brad Pitt se convertía en el chico de la portada por ser ser tecno. El título principal de ese número lo convertía en el máximo referente de las "New Rules For Digital Gentleman".
Era interesante como en ese reportaje, Pitt se transformaba en algo que él no era, ya que ni sabía cómo usar una PC. ("Brad did once say he wasn’t able to operate a computer, but it seems like he now knows a thing or two about going online")
Hoy, el actor argentino Ricardo Darín se convierte en el Brad Pitt de las pampas, y no por usar la misma barba del actor de "Inglourious Basterds". Él es el protagonista exclusivo de una campaña publicitaria hiper futurista para una empresa que vende tecnología. En ese comercial, con una solvencia absoluta de alguien que conoce y domina todo lo nuevo, el protagonista de "El secreto de sus ojos" se mueve en un mundo tecno como si fuera un gurú.
Pero de la misma forma que se hace difícil creerle a un Brad Pitt que no sabe prender su PC, la cosa se complica si uno analiza los 8 Tweets que uno puede encontrar en la cuenta de Ricardo Darín. Hasta su colega Guillermo Francella se burla de él, cuando pide ayuda porque no sabe cómo es eso de Twitter, con frases tan deseperadas como "Hola Twitter! A quien tengo que seguir?" o "Ponete las pilas Guille. Explicame como funciona esto"(sic)