29.3.07
Exclusivo: Elio Leturia habla con Rosa Castellanos
Estados Unidos recibió a la hondureña Rosa Elizabeth Castellanos en 1985, cuando era una estudiante de escuela secundaria. Graduada en comunicación visual y diseño de modas, Rosa empezó su carrera en el mundo editorial hace diez años. Del Asbury Park Press en New Jersey pasó al californiano San Francisco Examiner y en la actualidad se dempeña como diseñadora en el Detroit Free Press en Detroit, Michigan. Hace dos semanas la invité a que visitara Columbia College Chicago donde presentó su trabajo de diseño e ilustración ante una ávida concurrencia, en la cual mostró sus diseños ganadores de premios y explicó su proceso creativo. Esta es la entrevista.
Leturia: ¿Cómo funciona tu proceso de creación?
Castellanos: Comienza con objetividad. Si se trata de una ilustración para el periódico escucho lo que las personas del equipo editorial tienen que decir sobre el tema que estamos tratando. Después hago preguntas. Es muy importante que cuando acabe la reunión haya claridad en el objetivo del proyecto.
Luego estudio el tema. He aprendido en el corre-corre de un diario que hay que tomar decisiones de acuerdo al tiempo y a los recursos disponibles.
Establezco las prioridades del proyecto. Una vez que ya ha quedado todo claro con los editores comienzo la parte subjetiva del proceso.
A veces la idea aparece cuando leo el titular. Otras veces aparecen en mis manos al dibujar en mi cuaderno de bocetos con un marcador Sharpie.
En otros casos viene de la reunión editorial. Personalmente he aprendido a “guardarme” la idea antes de compartirla con los editores. Hablar de ideas es intangible puesto que antes de que se haga tangible, los editores ya la han asesinado [la idea], pues cada uno escoge su versión en cada una de sus mentes.
Es así que la mantengo en incógnito hasta compartirla con el director de arte para tener, de esa manera, un apoyo con una visión similar a la mía.
Leturia: Cuáles son los recursos que utilizas en tus ilustraciones?
Castellanos: Varían de acuerdo al tema. Mi técnica favorita es el collage. Utilizo papel de color con texturas, pasteles, acrílicos, periódicos, tinta china. Para estilizar los collages utilizo un marcador Sharpie color azul y liquid paper.
Otras veces incorporo elementos de deshecho y hago construcciones tridimensionales.
Hay que entender bien el tema, leer la historia, charlar con el escritor y el editor. Si el tema es de música escucho el cd; si es de teatro, por ejemplo, visito el sitio del evento con tiempo.
Leturia: ¿Cúal fue el proceso de creación de la página que ganó el premio de la SND en el último concurso?
Castellanos: Fue complicado de muchas maneras.
Primeramente la "flatulencia" no es un tema, digamos popular, para los lectores de diarios norteamericanos. El artículo estaba supuesto a salir publicado cuatro semanas antes en otra sección llamada "Life". Pero el editor de esa sección no aceptó la historia. Entonces se decidió moverla a Body&Mind [sección de salud] la cual iba a ser decontinuada del periódico en pocas semanas. Y como la sección ya habia sido desahuciada, el riesgo de imprimir una historia con tal tema no era tan grande.
No hubo mucho tiempo para pensar conceptos. Cuando el equipo de Body&Mind se reunió para hablar sobre la sección no existía ningún elemento de ilustración. Fue precisamente allí que la editora llamó al director de ilustración del periódico. En pocos minutos él nos mandó el "whoopi cushion" [cojín inflable]. Eso fue lo único que teníamos de arte para la portada y las páginas centrales.
El problema era que la imagen del “whoopie cushion” tenía tipografía muy grande y competiría con el titular. De chiste en chiste el titular salió de una conversación con el copy editor: Ooops!
Aprobado el titular la idea vino naturalmente. El propósito era unir el arte con el titular y asi se dio!
Leturia: ¿Pero por qué tan complicado?
Castellanos: Es que el tema no se tomó en serio. La ilustración nos cayó en la mesa, literalmente hablando, durante la reunión de planificación. Y como dijo la escritora de la historia: "Nos iremos con un gran BANG!" [con efecto de flatulencia sonora].
Leturia: ¿En qué se diferenció de otras páginas?
Castellanos: En que esta página fue, como se dice, un examen acumulativo, donde la astucia para producir calidad en poco tiempo culminó en el producto.
A veces hay páginas donde se pone tanto esfuerzo, que la idea, que la ejecución, la comunicación con todos los que participan en el proyecto y al final no son apreciadas. Otras páginas son el producto de todos los esfuerzos anteriores y funcionan. Esta página tomó su propia vida, aparte de los que la creamos.
Como decimos en mi pueblo: fue de chiripón!
Leturia: ¿Cúales son los obstáculos a los que te enfrentas para que una buena idea salga publicada?
Castellanos: El primer obstáculo que enfrento soy yo misma. Es muy importante tener confianza y ser enérgica conmigo misma. También saber cuáles son los ideas que vas a defender y desarrollar.
Segundo, los editores. Ellos tienen un punto de vista diferente. Eso no es malo en sí. Siempre tomo sus sugerencias en cuenta. Con eso no quiero decir que les doy licencia con mi rol de diseñadora.
Tercero, los fotógrafos. Es importante tener una buena relación con ellos, pues hay muchos egos flotando en las salas de redacción.
Leturia: ¿Te es útil ser bilingue y bicultural en el ambiente en que trabajas?
Castellanos: Creo que sí. Pienso que tengo lo mejor de dos mundos. Aunque no hay muchos latinos donde trabajo, sé que ser bicultural le da un sabor al trabajo que hago, principalmente en un ambiente como Detroit donde hay mucho “funk”.
Leturia: ¿Cuáles son las diferencias de trabajar con norteamericanos y con latinos?
Castellanos: He trabajado con pocos latinos. Pero con esos pocos he establecido amistades en lo profesional y personal. Cosa que es muy raro con los norteamericanos. Trabajar con norteamericanos es incierto. No se sabe donde está parado uno. La mejor actitud a tomar es de hacer el mejor trabajo posible y mantenerse profesional.
Leturia: ¿Qué necesita un buen diseñador para ser exitoso?
Castellanos: Primeramente tener pasión por el trabajo que hace. Es muy importante tener un buen sentido del humor y saber balancear lo personal con lo laboral. El diseñador es un maestro que educa a diario, con su ética y voz visual, a los compañeros de trabajo y al lector.
Siempre es importante mantener diálogo con otros diseñadores que uno respeta como profesionales y personas. Saber escuchar y escoger la mejor solución posible. Aprender a tomar la crítica constructiva como una oportunidad para seguir desarrollándose. Lo importante no es cuán grande es el trabajo que uno hace sino cuán bien se trabaja con los demás. Hay que seguir creciendo con los tiempos.