"Yo he traído aquí unos ejemplos del diario Marca. Me parece que el diario Marca de Madrid es un deportivo distinto. Yo no sé como explicarlo mejor, pero eso es alma. Cuando el As, que es su competidor, dice Molina tiene cáncer, que es un portero (arquero), Marca dice Lo va a parar".
Eso tiene el nuevo diseño-rediseño de Olé: tiene alma. Pero antes, ¿la tenía? Si. ¿Entonces? Por lo menos, con el rediseño no lo perdió.
Es interesante hacer un paralelismo entre lo que dijo Errea y lo que debería ser un diario deportivo, porque allí vamos a encontrar ciertas palabras claves para entender lo nuevo. Errea, como algunos de los lectores de VisualMente (muchos), le piden a los diarios deportivos que sea deportivos y no diarios futboleros. Pero los amantes del jogo bonito, en estas partes del mundo, son unos cuantos y definen el partido.
"Y finalmente les presentamos lo que podría reflejar el nuevo Marca, con más deportes, no sólo fútbol, para un tipo de lector más preparado. Esto viene a cuento de que Marca padecía una crisis por varios motivos, sobre todo por la competencia de otros deportivos nacionales y de las secciones de deportes de otros diarios regionales y de la televisión. Por eso nosotros sugeríamos la posibilidad hacer un diario Marca no tan popular".
El Olé modelo 2006 tiene mucho del Olé anterior, sobre todo por su cercanía a lo políticamente incorrecto que encuentra en el francés Eric Cantona un abanderado. Esa fuerza para jugar se verá totalmente representada por la nueva tipografía de Olé. Sin ser misógino, El Norbi cree que existen fuentes deliberadamente identificadas con el género masculino. El gran cambio de Olé pasará ahí. El jefe de arte del diario, Pablo Battovaz encontrará en la Dispatch, la fuerza de Cantona para esta nueva etapa de Olé. Esta tipografía de pesada base logra una presencia muy fuerte en los cabezales de las páginas, con un cuerpo generoso que se tira para adelante, sin marca, ya que tiene varios espacios en blanco.
Otro de los cambios más atrevidos de este diario es la sexta columna, que logra un efecto visual de mayor cantidad de información. Esto en un tabloide común provocaría cierto ahogo, si no fuera por el interlineado exacto que se maneja. Las aperturas de los suplementos y su interior cambian la composición cromática del diario, sin perder la identidad. Esa identidad que el naranja le da al cuerpo principal se continúa en el interior de todo el diario con un detalle muy festejado por nuestro blog: en las informaciones numéricas y en los recuadros, la gente de Olé usa el mismo verde limón de los fondos de VisualMente. Gracias, muchachos.