Dicen que cuando uno se muere, una sucesión intermitente de imágenes de la vida que vamos dejando asaltan nuestra mente. Pero, por desgracia, el camarógrafo argentino Leonardo Henrichsen se vio asaltado por la peor imagen posible que podía inaugurar la comparsa visual de su vida. El 29 de junio de 1973, durante una intentona golpista contra el gobierno de Salvador Allende, el suboficial del Ejército chileno, Héctor Hernán Bustamante Gómez, efectuaba el disparo mortal contra Henrichsen. La imagen que precede este post muestra el instante preciso del disparo que el argentino filmó hasta el final.Hoy, el diario argentino Clarín recuerda ese momento, con una investigación de Fernando González y una apuesta gráfica que acompaña con excelencia visual un título que sigue sorprendiendo por lo real. El argentino se plantó ante la muerte. En ningún momento se escapó de su cercano destino. Una cámara, una lente, contra un arma, una bala. Más arriba, Chiruco le mostraba al mundo un presidente que defendía una forma de gobierno como si fuera una forma de vida. Acá, Leonardo Henrichsen mostraba la cobardía de los que abusan del poder prestado por el pueblo.
Un aparte merece la editora del diario Clarín de los domingos, Silvia Fesquet, quien demuestra semana a semana cómo se debe hacer periodismo gráfico de excelencia. Por eso, ella estuvo en nuestras Segundas Jornadas Universitarias sobre Diseño de Información, junto con Dani Yako, hablando de estas historias visuales.