Efecto del cambio en los 5 meses posteriores al lanzamiento
del nuevo formato tabloide (en % - 1997-2004)
>> Muchos costos de impresión y distribución son fijos y no van disminuir.
>> Los ingresos por publicidad van a bajar, probablemente alrededor de un 20%. Las razones son varias. Primero, los avisos se encogen de tamaño tanto como lo hacen las páginas, y los anunciantes no querrán pagar lo mismo por una menor exposición. Segundo, los tabloides están asociados con un contenido más frívolo, mientras que los sábanas se las dan de más serios. Este imaginario determinaría que algunos anunciantes podrían no sentirse cómodos apareciendo en un tabloide y, por lo tanto, se pasarían a otros sábanas u otro tipo de medios. A pesar de todo, las pérdidas por publicidad se recuperarán en un par de años, a medida que crezca la circulación.
>> Los miembros de la redacción no suelen ver el cambio de formato como una excelente idea. Les preocupa el posible deterioro en la imagen de calidad editorial del periódico, las modificaciones en las rutinas de trabajo y los posibles despidos (sobre todo porque los tabloides implican muchas veces una reducción en la cantidad de contenido).
El 24, algunos consejos para atemperar estos riesgos lo más posible.
Traducción y adaptación de “Dwindling readership: are tabloids the
answer?”, publicado recientemente en The McKinsey Quarterly. Agradecemos a Carlos Soria, de Innovation, por enviarnos este trabajo.
También:
>> Tabloi: la solución divina para la pérdida de lectores (I)