4.4.12
Exclusivo: Las primeras imágenes de la nueva película de Diego Torres que hizo El Trapa
Él había sido el protagonista indiscutido de nuestras Sextas Jornadas Universitarias sobre Diseño de Información que hicimos en el 2009. Hoy la realidad de Fabián Trapanese pasa por lo fotográfico, su amor eterno. Mañana se estrena "Extraños en la noche" con el cantante argentino Diego Torres y El Trapa es el responsable de las fotos fijas de la película argentina.
1. No todos saben lo que es foto fija en cine. Cómo lo definirías vos?
A ver, formalmente, la fotos fijas son las fotos que se hacen durante el rodaje, para luego promocionar la película. O sea, las fotos que luego veremos en las críticas de los diarios y revistas; las que componen los kits de prensa que van a los festivales; las gacetillas de prensa, etc. A veces -sólo a veces- se utilizan fotos fijas para el afiche de la película, pero no ocurre siempre -y no tiene nada que ver con la calidad de las fotos fijas, sino con el diseño de la comunicación-. Así la definiría yo. Es un trabajo fascinante que, por las salvajes reglas del mercado y hasta de la tecnología, a veces hoy no se le dá el valor que se merece en la industria del cine.
2. Contame un poco sobre éstas fotos. Cómo es la película que querés contar desde tus imágenes?
Buena pregunta, que tiene varias respuestas no sé si tan buenas. Por un lado, yo tengo la responsabilidad de contar en fotos -fijas-, lo que la película transmite en movimiento. Ser fiel a la luz elegida de cada escena, reflejar el acting de los personajes, los climas, hasta la música te diría, etc. Por eso, lo mejor que le pueden decir a un fotógrafo de cine es "viendo las fotos siento que estoy viendo la película", porque significa que uno hizo bien su trabajo.
Ahora, lo que cuento en estas fotos es otra cosa. Estas no son fotos fijas, sino fotos que hago para mí, con mi punto de vista personal de lo que estoy viendo, que tampoco es necesariamente fiel a lo que ocurre frente a la cámara de cine (que de hecho, suele estar ubicada en otro lugar, en otro ángulo y enfocando otra cosa) Por empezar, el 98% de las fotos mías que ves en blanco y negro... "las hago" en blanco y negro.
Y ese es un tema para largo... que intentaré sintetizar: "las reglas y los grandes genios" de la fotografía digital dicen que las fotos hay que hacerlas siempre en color(y en Raw, pero ese es otro tema) y luego, en Photoshop, pasarlas a blanco y negro. Y a mí me parece que eso es, de alguna manera, es traicionar a la esencia misma del blanco y negro. Para hacer reales fotos en blanco y negro hay que ver en blanco y negro. Y punto. Es un tema que da para largo y que moriré siéndole fiel.
Por eso las fotos que ves acá fueron hechas en blanco y negro... porque "las ví" en blanco y negro. Y por eso, quien vaya a ver la película se encontrará con otro clima, colores... y ni un fotograma monocromático.
3. Cuál es la que más te gusta? Por qué?
La del gordo mirando de costado me parece terrible. Es un extra aburrido de estar ahí desde las 7 de la mañana -y que seguro se levantó a las cinco- alguien que sabe que seguramente ni aparecerá en la película... pero en el fondo, película tras película, guarda la ilusión de verse ahí.
Como dijo un amigo: si las copas fuesen vasos de whisky, sería mucho mejor aún.
El primer plano de Diego Torres a contraluz me gusta desde lo técnico, ya que no es una foto muy simple, y desde su seriedad, que contrasta con su rol en la película y hasta con él mismo como persona.
Me gusta también la de Laura Conforte dando vueltas al caño, por el movimiento, por ese touch erótico potenciado por el blanco y negro. También me gustan mucho las de las piernas de Alexia Moyano, unas fotos que, ahí tenés, en color dirían algo muy diferente.
4. Cómo trabajaste en la fotografía del hombre mirando la nada, mientras que Diego Torres aparece como sugerido atrás?
Obviamente, es un momento previo a la toma. La cámara de cine estaba ubicada en otro lugar, encuadrando otra cosa.
De hecho, creo que yo estaba a 90 grados de ella, mientras los nobles técnicos iban de acá para allá.
Ni siquiera Diego iba a estar ahí luego, en toma. Yo ya venía mirando al tipo "mirando la nada", esperando el momento justo para hacer la foto. Y aparece Diego por atrás... y así y todo, decidí no cambiar el foco.
Porque el protagonista, por una vez en su vida, era el perdedor. El tipo sentado con dos copas delante, pero solo, solo y triste. Un tipo que, en la vida real, tenía a Diego Torres a medio metro y a cien kilómetros a la vez.... y para él nada de esto parecía tener un significado especial.
Bueno, convengamos que ahora, contándolo así, suena mejor aún, pero eso es más o menos lo que creo haber visto... en blanco y negro. En color es otro precio, más accesible.