Avisa que el domingo será su último partido en la Bombonera. Confiesa su tristeza por no estar en la selección argentina en Sudáfrica. Juan Román Riquelme vive como juega con la pelota. Tiene códigos. Muchos dejaron en el camino ciertos principios a cambio de conseguir el apoyo de la barra brava de Boca Juniors o de ciertos periodistas que dedican sus centímetros de texto en los diarios deportivos, a los jugadores sin códigos.
Hace un año murió mi vieja y no puedo separar mi cariño por Boca sin acordarme de ella. Ella todavía está presente en mis días y cada vez que gana el equipo, miro para arriba y se lo dedico. Por suerte, siempre coincidimos en nuestros preferidos dentro de los jugadores. Palermo nunca me terminó de convencer. Y a ella tampoco. Pero de la misma forma que ella no recordaba bien el apellido del arquero (Abbondanzieri), a la hora de hablar de Palermo no dudaba en sus críticas.
Sólo recordaba, después de cada partido, lo bien que jugaba un muchacho. Ese "muchacho", como ella decía, no era otro que Riquelme.
El ilustrador del diario Zero Hora de Porto Alegre, Gilmar Fraga, quien estuvo en nuestras Terceras Jornadas Universitarias sobre Diseño de Información, es un reconocido fanático de Gremio. El 13 de junio de 2007, después de la derrota sufrida por su equipo contra Boca Juniors, por 3 a 0, Fraga se puso a dibujar, con odio.
Yo te banco, Riquelme, ahora y siempre. Otras veces que te banqué:
1. Capítulo 9, contra River, acá.
2. Capítulo 8, acá.
3. Capítulo 7, acá.
4. Capítulo 6, acá.
5. Capítulo 5, acá.
6. Capítulo 4, con Messi en la Selección, acá.
7. Capítulo 3, acá.
8. Capítulo 2, acá.
9. Capítulo 1, acá.