(Para el diario Clarín, Suplemento Mujer, que sale mañana, y se llama "Urban Spas")
Como te contamos la semana pasada, a partir de octubre comienza a colaborar en VisualMente, en exclusiva, la gran artista argentina.
(Por Fernanda Cohen) Desde Nueva York parece que todo estuviera pasando en Buenos Aires últimamente- onedotzero, Pictoplasma, Pepsi, Urban Art, Arte BA, etc…- con una energía indescriptible que es (en parte) la consecuencia de la falta de recursos por esta crisis nacional que no se termina más. Nueva York, en cambio, lo tiene todo, a lo cual uno se acostumbra demasiado con el tiempo. Sin embargo, siendo argentina, radicada acá hace 9 años, y habiendo visto las dos caras de la moneda, logro combinar la energía porteña con la abundancia neyorquina.
Soy ilustradora freelance, trabajo con unos 3 ó 4 clientes diferentes cada semana, enseño en la School of Visual Arts, tengo mi estudio en mi casa de Brooklyn, y viajo unas 6 veces al año. Como si esto no fuera suficiente, en los últimos dos años de mi corta (pero agitada) carrera me involucré también en la trastienda de ilustración, una disciplina que en Estados Unidos es casi tan trascendente, y hasta a veces más, que diseño gráfico.
El puntapié inicial fue ICON, la única conferencia en Norteamérica que se enfoca exclusivamente en ilustración. La más reciente fue en julio de este año en NY, con 470 personas, 30 conferencistas y figuras como James Jean, Steve Heller, Edel Rodriguez, Kid Robot, Gary Panter y el equipo creativo de Starbucks.
A raiz de esta experiencia la Society of Illustrators of NY me contrató para organizar una serie de Eventos Especiales que incluye paneles con directores de arte del New York Times y el New Yorker, y diseñadores de juguetes de Kid Robot y I Love Dust (UK), así como talleres creativos con Victoria Roberts y Marcos Chin. El 2009 nos espera con James Jean y Gary Baseman, entre otros invitados.
La sensación que uno termina teniendo en una ciudad tan caótica y ompetitive, pero a la vez eficiente y abierta, es que si uno no pica de todo un poco, más vale mudarse a otro rincón del mundo donde el éxito pasa por una órbita completamente diferente.