(Fotos gentileza de Marcos Batista)
La historia subió rapidamente a los diarios. Todo parecía indicar que la pelota con la que se había ganado el Mundial 78, contra Holanda, estaba en Brasil. La famosa bola formaba parte de la decoración de un bar en el barrio Vila Madalena de San Pablo. Las agencias internacionales de noticias habían inundado las redacciones con esta información, pero ninguna foto.
Los detalles de la historia siguen siendo sorprendentes y bizarros. El esférico que estaba firmado por los jugadores de Argentina, había sido regalado por el suizo Joseph "Sepp" Blatter (actual presidente de la FIFA) a un directivo de la cadena brasileña Globo, Eldir Vale, el 25 de junio de 1978.
Vale, ya fallecido, regresó a Río de Janeiro, y le obsequió la Tango firmada a uno de los periodistas de la emisora, Toninho Neves. Este la guardó por 30 años, según le contó a la agencia italiana Ansa, pero no la cuidó demasiado. "Mi hija Laura, que nació en 1984, jugó un tiempo con la pelota y se desgastó el cuero, lo que no permite ver bien algunos autógrafos", contó Neves, actualmente en Rede TV de San Pablo. En enero, cuando supo que su sobrino Marcos Batista iba a abrir su segundo bar temático sobre fútbol en San Pablo, se la regaló.
Hoy, Batista nos mandó las fotos de la pelota, que el mismo sacó, antes de guardarla en una caja fuerte. "Devido a repercussão da matéria sobre o bar falando da bola, decidimos retira-la do Bar e a colocamos em um cofre bancário", sostuvo. VisualMente se muestra en exclusiva la pelota de la que se habló mucho en la Argentina esta semana.
