7.6.07

(t) "Prefiero la Griffith Gothic, por su modulación y forma tan peculiar"

herminio1
(Herminio J. Fernández, consultor español)
Qué tipografía: 1) Usas frecuentemente? (Por qué?)
1) Minion (Robert Slimbach, 1990). Es una 'Romana antigua' de muy buena legibilidad y fácil empleo para texto base, por su buen contraste con la negrita y excelente con la cursiva. Así que la mantengo en todos mis rediseños, sobre todo porque al estar incluida en el pack de FontFolio de Adobe es barata, y prácticamente un estándar. La tenemos en muchos periódicos, por lo que me resulta fácil de implementar en cualquier trabajo externo. Para titulares no me funciona tan bien porque su negrita me resulta un tanto tosca en algunos detalles: al fin y al cabo esta inspirado en las venecianas del siglo XVI, y en cuerpos más grandes es más elegante la evolución de las Garaldes del siglo XVII o las Reales del XVIII. Hay tipos inspirados en 'romanas antiguas' creados últimamente más hermosos y estilizados, como Poynter o Miller ideales para titular. Sin embargo, aunque la negrita no funcione tan bien, la versión Minion Display es preciosa en redondas a tamaños grandes y la uso siempre que puedo.
2) Prefieres? (Por qué?)
Griffith Gothic (Tobias Frere-Jones, 1997): Es una lineal muy versátil por extrema la gama de anchuras que posee, y además por su forma muy personal y tremendamente contemporánea (por su modulación y forma tan peculiar), aunque esté basado en la ya veterana Bell Gothic (C.H. Griffit,1937). La versión light es muy legible y ágil en la composición de cuerpos pequeños, y su versión ultra es inconfundible: uno de los martillazo tipográficos más contundentes que puede haber en un titular de deportes, junto la a la más reciente Amplitude (Christian Schwartz, 2003), que en cierto modo es una especie de sucesora como 'sans serif de moda'.
3) Odias? (Por qué?)
Bueno, tanto como odiar...Me gustan muy poco las tipografías recargadas y engoladas de la época Art Decó, al principio del siglo XX, que son tan populares porque son clásicos baratos, están en cualquier recopilación de tipos, y acaban emborronando trabajos escolares, como Bauhaus (1925), Clearface Gothic (1910), o la Cooper Black (1927). Pero sobre todo yo aún tengo pesadillas con la Chicago (1984), el tipo de sistema de los primeros Mac. Era una tipografía pensada para verse en las malísimas pantallas monocromo de entonces, pero que acabaron titulando periódicos estudiantiles. Impresa era horrorosa.