La nueva propuesta tiene un estilo gráfico más moderno y una gran austeridad con los colores: todo es blanco y el toque de color apenas está dado por las fotografías.
En la homepage, decidieron eliminar la barra de navegación a la izquierda para concentrarla sólo en la parte superior y pasaron de un planteo de tres columnas a uno de dos.
Las imágenes siguen teniendo poco protagonismo y la única vedette es el texto. Tampoco existen audio o videos.
En cuanto a los elementos de personalización e interactividad tan difundidos en otros medios digitales, Página/12 sólo agregó la posibilidad de que el lector pueda armarse una carpeta de recortes con los artículos elegidos. También es posible aumentar o disminuir el tamaño de la tipografía de los artículos.
Y no asoma ninguna clave que indique que vayan a decidirse a incorporar contenido actualizado a lo largo del día.
Por ahora, poco más. Apenas una refrescadita cosmética, aunque bienvenida. Tal vez haya más cambios en las próximas semanas. Veremos.